Profesor de la Universidad Central del Ecuador. Doctorando en el área de Historia y Ciencias de la Música de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM). Magister en Estudios de la Cultura Mención Artes y Estudios Visuales, Universidad Andina Simón Bolívar. Licenciado en Comunicación Social (UCE).
Ha publicado 6 libros de poesía, entre ellos se destaca: Mi padre en las rieles de Sumpa (2011); Con un manuscrito en el horizonte obtuvo el II Premio en la Bienal Nacional de Poesía “Juegos Florales” en el año 2011 (La Caída, 2015); Nomenclatura del Internado (Mar Abierto-Manta, 2012); Rebeliones al filo de una sinfonía (Buenos Aires, 2015) Premio Nacional de Poesía “Jorge Carrera Andrade”. Almanaque encontrado en una noche fría (UAM, 2016) Finalista del XVI Concurso de Poesía organizado en la Universidad Autónoma de Madrid-España.
Ha publicado estudios La metálica luminosa y Una correspondencia a la memoria (Dadaif Cartonera, 2012), acerca de la vanguardia del poeta Hugo Mayo. Ha realizado el estudio, selección y recopilación del libro; Premonición a las puertas Reciente poesía ecuatoriana (Universidad Central del Ecuador, 2012). Ha publicado el libro de ensayos Vientos paralelos: acotaciones sobre cultura y literatura (CCE, 2015).
Sus ensayos y artículos han aparecido en revistas como Cultura de Veracruz, La Jiribilla (Cuba), Página Zero Revista de poesía (Eivissa), Cyberalfaro (Universidad Laica Eloy Alfaro de Manabí), Filo-Sophia (Universidad Católica de Quito), Casapalabras (CCE), Textos y Contextos (Facso-UCE). Ha participado en el Encuentro Internacional de Poetas y Artistas (ULEAM, Manta, 2011, 2012), Festival Latinoamericano de poesía Sumpa-Vive (2012), Encuentro de Jóvenes Escritores de América Latina y el Caribe, por la XXI Y XXII Feria Internacional del Libro, La Habana-Cuba (2012, 2013). Taller de escritura en la Unidad Penitenciaria de San Martín J. L. Suárez N. 48, Buenos Aires-Argentina, 2014. Forma parte de la Sociedad Imaginaria de la Universidad Cienciasófica de América Latina, fundada por el escritor, matemático y filósofo peruano Enrique Verástegui. Reside en Madrid.
Del libro: MI PADRE EN LAS RIELES DE SUMPA (Drugos de la Naranja, Quito-2013)
…mi padre excretaba un líquido de miradas en la escalera de las rieles
VII.
Mi padre con señales de astillas en los dedos
con el papiro de arena atravesaba
las falanges de un antepasado
mi padre y sus conversaciones del domingo
a dónde se fueron las líneas de sus canas
dónde desgarraron la lengua sus corbatas
si vivía la metamorfosis de una cáscara
y recogimos
en las calles la fósil pisada de un perro
creímos en las aspas de los sentidos
hablamos de un atrofiado bastón
o del inhóspito movimiento de la cuna
en la disecada noche que se iba entre delgadas
patas de un zancudo
Del libro: NOMENCLATURA DEL INTERNADO (Mar Abierto, Manta-2013)
memoria en re
Y en el Sur un discípulo anuncia la triple existencia
ahijado de los mármoles
temerosas sus pantuflas en la quinta rayuela
desperdiga al amanecer de su cabello
y él hablando de la angustia boca abajo
respirando letras en un trigo
Y del Sur yacen polares apellidos
que alguien pronunció
mientras desaparecía el domingo de sus canas
son imágenes de alabastro
dislocándose en una baldosa
ensayando un elástico olvido
aún así edifico la contraluz del punto.final
memoria en sol
Alguna vez el tiempo calcinó
su espanto en las curvas
escribió su biografía
entre juguetonas dimensiones
y renunció a seguir la ceremonia del zapato
Y aún la nostalgia de mis pulgares
manosean la perilla del sueño
Gira el ojo
sesenta veces el cubismo del horizonte
el caballo va a las huellas del Sur
y topa el paralítico vacío del camino
Dentro del escaparate se dislocan los carrizos
Y en el Sur hubiera reunido a un lazarillo con su quebranto
ya sin escuchar la palabra de sus ausentes
todavía duerme su cuarto menguante
siempre cercano a la anterior madrugada
EL DESPLOME DE LAS HORAS
En el penúltimo destiempo del cielo
se escucha la misantropía
de una mujer
casi siempre la lluvia
desgarbando el silencio de las manos en el tiesto
Un ciego intercambia manuscritos de vidrio
con su sombra
y se concentra en la fisonomía de sus caricaturas
arroja barajas al hospicio
en la abertura de su zapato yace un corazón invertido
Ya es tarde
las nueces sucumben sobre la escritura del mármol
el corte de una tijera
atravesando el invierno de la memoria
La vejez de un número regresa
a un pluscuamperfecto minuto
una estrella serpentea entre las palabras de un niño
y desploma sus puntas en el embudo
En ocasiones mis ojos ocultan
membretes del vacío
pero una mariposa desfigura el amor en la ventana
y el cuaderno sepulta canas del loto
huérfano de la madrugada
en la esquina de un teatro
repentinamente dibujo
el horizonte de un antepasado
y aunque menos sílabas tiene una sonrisa
agujas circulares prolongan la biografía de una imagen
Del libro: REBELIONES AL FILO DE UNA SINFONÍA (Línea Primitiva, Buenos Aires-2015) Premio Nacional de Poesía Jorge Carrera Andrade, 2015.
LAS TERAPIAS DEL PUNTO
Acto I
(.)
Y tan solo iniciar su existencia en letras mayúsculas
sentir un contrapeso de minutos
atascar el olvido
en los alfileres de astillas
y chamuscar las manos
para arrojar un punto al cuaderno
Acto II
(.)
(.)
(.)
….…suspender la estela de puntos con el trompo…….
….…….....….………………………………..
….………….................... ...….…..
….……....………..…..
.……..……
...……
…
(…)
Acto III
(.)
Hay un ciego
despierto entre las cuatro cifras del amuleto
espulga en el pizarrón sus vocablos
se siente impostergable
ante más edades
cuando ya se han consumido
los puntos suspensivos de sus huesos
(.)
Acto IV
(.)
Y dejar más signos en la piel
Acto V
(.)…(.)…(.)…(.)…(.)
La terapia dislocada del punto
… de perseguir los rieles de la línea
Acto VI
(.)
(…… y una niña confundida
entre la fragancia del esmalte
revisa los borradores
Su crayón minimiza la marca circular de un siglo
En sus lunares se pronuncia
la cosecha de paleolíticos puntos…...)
Acto VII
......................
Un hospital de agujas
en el nervio de muchedumbres
entre las camillas
el pinchazo de un punto
interrumpe el diálogo de los internos
hasta trozar el descalabro de sus palabras
......................
Acto VIII
A veces su figura en la ceremonia del tiempo…
señala una tóxica agonía…
de doce espacios en la mente…
y queda reemplazado…
por un número cartesiano en el cuarto de un siglo…
Acto IX
Era en el solsticio de un hombre
donde estigmatizó el avance
de los trigos a la memoria
calendarios de barro
el piramidal diente
de su infancia cayendo en una ladera
Meridiano ( . ) silenciO
deshilado su pelo con el sombrero
soltaba lagañas a las hoces
y un páramo más hundía
cada raya de su rostro
al amanecer
acudía a olvidar
su osamenta en la estera de paja
Silencio ( . ) MeridianO
Acto X
Garabato de los maderos
donde un clavo perdió sus índices
una estrella sutura sus cinco espacios
antes de encender la duda del apóstol
Los zapatos opacan su esférica arquitectura
es un acordeón en el séptimo claroscuro
quebrantado nudos a las oraciones
Y como un hongo extiende
nebulosas en el océano del vidrio
Zigzaguea su sombra mientras la tinta china
regando un pensamiento
Acto XI
El dilema de coincidir ( … ) en la mitad de un ojo
y estar atravesado por la angustia de lo líquido
Su signo
diagrama los rituales de manuscritos
naufraga en los tabernáculos del éxodo
Punto final . para dormir bajo las molleras
Y un génesis de acuarelas santificando el difunto mármol
el punto final . de la niñera
cuando maquilla a un pequeño acróbata
Y una voz malanochada se extingue en rectas numéricas
y espera que el dedo índice antes de las seis
al fin edifique en la hoja el punto final
Acto XII
Y tan solo culminar
su existencia en letras minúsculas
la levedad de los segundos con el viento
Ensoñación de puntos cardinales
hacia las fauces de un embudo
esquizoide con las manos
por congelar más puntos en una carpintería
sinfonía de lo intacto
Un
bastón hacía duelo al camino
sin haber tocado el sonido de las manos
Una
quinta sensación de espejos
partiendo los calendarios de un cuerpo
Un
niño que buscaba las leyendas del mármol
en el párrafo de la sombra
Una
madrugada
la lluvia renunciaba a las puertas
porque la vejez escapaba de la cerradura
Y los saltamontes
dormían en el pletórico aroma de la leña
Un
caballo patinaba en las cicatrices del barro
para incendiar los cuarenta ayunos de un siglo
Una
sinfonía de la tierra
imitando el encuentro de las voces en la vía del origen
Un
apóstol piedra
hincado en la lejanía del páramo
ante la víspera de la estrella
Un número horizonte
Una bisagra para oxidar el cabello
Un escriba del ocaso
Una minúscula canción revoloteando en el rondador
UNOS milenios más silbando fonemas entre las mareas
sinfonía de los escombros
Todos hincaron sus ancianas historias
en aquel nido de carrizos
había llegado el momento de tapar
el corazón con un sombrero
alguien se había ido por la puerta del meridiano
Era la postergación del silencio
el amuleto que sudaba en las manos
acaso el ausente fonema que zumbaba por los siglos de los siglos
entre las hojas de un trébol
Y una incesante caída de agua
sobre aquel plato donde los perros lamían el óxido
Algunos se quedaron en la sombra
porque no alcanzaron los cuerpos de un jeroglífico
ya huérfanos de las voces
sin el movimiento del sonido
en el escombro del horizonte
se habían congregado
a desgranar en el patio los augurios que invocaron en una fogata
Muestrario Bibliográfico